Categorías
Durante el viaje

Cómo vencer el miedo a volar.

¡Aquí estamos! Planeando un viaje, abrasando multibuscadores y con muchas ganas de encontrar nuestro vuelo. Pero nos asalta algo en nuestra mente. Ese aparato que surca los cielos mágicamente… Y nosotros ahí dentro tan pequeños, frágiles y vulnerables… Hay a quien no le asusta, pero es normal tener algo de miedo, ya que normalmente no estamos a trece mil metros de altura. Si eres una de esas personas que se asustan, no te preocupes. En este artículo voy a compartir contigo algunos trucos para vencer el miedo a volar.

Vencer el miedo a volar - Haz La MochilaVolar es una parte esencial de nuestro viaje. Desde ahí arriba se ve todo de otro modo. El cielo es el camino a la libertad, ya sea un viaje de ida, de vuelta o intermedio. Lo más importante es que no debemos dejar que el miedo a volar nos haga renunciar a un viaje. En realidad lo que nos da miedo no es volar, ya que nosotros estaremos tranquilamente sentados en nuestro asiento, comiendo nuestro menú y bebiendo nuestra cerveza. Lo que nos da miedo, en todo caso, es que ocurra algún tipo de fatalidad. Así que este miedo es el que vamos a contrarrestar.

Vamos a emplear una sencilla técnica psicológica antes y durante el vuelo. Más que una, varias en combinación. Los miedos están en nuestra mente, y como seres presuntamente racionales podemos controlarlos, y también anticiparnos.

Vamos allá.Vencer el miedo a volar - Haz La Mochila

1.- Antes del vuelo.

Por un lado, los días antes del vuelo pueden suponer una gran carga de ansiedad para las personas con miedo a ir en avión. Lo primero que hay que hacer es pensar en las inmensas medidas de seguridad de los aviones, la cantidad de revisiones que se hace a todo y, por supuesto, que quien lo «conduce» es una persona que se ha preparado duramente para ello, y que valora tanto su vida como la de los cientos de personas que lleva detrás viendo capítulos repetidos de «cómo conocí a vuestra madre».

Bien. Todo esto lo damos por hecho. La técnica más efectiva para reducir esa ansiedad es pensar, más que en el vuelo, en el momento del aterrizaje. Visualiza ese momento incluyendo un estímulo que te guste especialmente. Aquí vale cualquiera; a los fumadores les vendrá genial imaginarse el cigarrillo que fumarán al bajarse del avión, por ejemplo. A mí personalmente me gusta el café, y la taza que me bebo siempre al bajar del avión es motivo suficiente para estar tranquilo.

La razón por la que esta técnica es realmente efectiva radica en la respuesta neuronal que se produce. Somos un amasijo de reacciones químicas. Cuando visualizamos algo que no nos gusta, el corazón late más deprisa, los músculos se tensan, la adrenalina empieza a fluir, nos sudan las manos… El cerebro envía órdenes a todas partes de que hay que echar a correr. Es un mecanismo de defensa genético, Doc. Sin embargo, cuando cambiamos eso por una imagen positiva y realista, la respuesta es otra. El cerebro asocia el momento placentero que estamos visualizando como algo totalmente real, ya que realmente lo estamos programando así. Ya no hay necesidad de huir, y en lugar de ordenar chorros de adrenalina, el cerebro prepara la dopamina para recompensarte a base de bien.

Vencer el miedo a volar - Haz La Mochila2.- Durante el vuelo.

Llegamos a la puerta de embarque. Hasta el momento, hemos estado pensando en lo que vamos a hacer al llegar, pero claro, ahora toca volar. Y el avión es enorme y hay unos tipos con linternas apretando tuercas. La adrenalina quiere abrirse paso pero… vamos a detenerla con otra técnica psicológica.

Para comprender la dinámica, hay que pensar en un escalador, que va subiendo una pared, asegurado por otro. Ha subido bastante desde el último seguro, y si cae tiene un «vuelillo» asegurado hasta que la cuerda le haga parar. Llega a un paso complicado, se «bloquea», le empieza a temblar la pierna (moto), y los dedos empiezan a perder fuerza (piano).

Para evitar el vuelo de su compañero, el asegurador hace ruido con los mosquetones. El clásico ruido de abrir y cerrar un mosquetón. El cerebro del escalador le envía una señal subconsciente de «calma, estás seguro», así que la moto y el piano cesan, el escalador supera el paso y «voi la», llega a la siguiente chapa y coloca el mosquetón correspondiente. ¿Qué sucedió? El sonido del mosquetón es asociado automáticament a una situación segura, que es lo que recompensa al cerebro. El cerebro premia al resto del escalador con dopamina, se reduce la ansiedad y se ve todo mas claro. Al llegar al punto seguro, lógicamente se va a segregar más dopamina, serotonina y de todo, pero una ayudita en el camino viene muy bien.

En el avión se puede hacer exactamente lo mismo. Al igual que un niño lleva su osito de peluche, nosotros hemos de pensar en esto y anticiparnos. No hace falta llevar mosquetones; podemos buscar estímulos que asociemos a un entorno seguro. Sin ir más lejos, el teléfono móvil puede ser de gran utilidad, ya que solemos utilizarlo en entornos seguros. Al escuchar música, ver fotos o jugar a «cadillacs vs dinosaurs» se puede provocar este ansiado efecto. Otros estímulos pueden ser algún alimento concreto, alguna fragancia, algún objeto relevante, etc. Dependerá de cada persona, ya que para cada uno tenemos nuestra idea de entorno seguro y lo que nos hace sentirnos así.

Contra el miedo, por tanto, hay que ser proactivos y anticiparnos. ¿Qué otras técnicas conoces para vencer el miedo a volar?

¡Un abrazo!

Gonzalo.

Volver al inicio

Ahora que ya no tenemos miedo… ¿A dónde vamos? ¡Las posibilidades son infinitas! A mí el buscador que más me gusta es siempre SKYSCANNER. Haz click en el banner y encuentra vuelos muy baratos:

 

 

 

 

Por Gonzalo Oslé González

Soy un animal humano que no puede estar quieto. Es por eso por lo que he ido caminando por algunos lugares de nuestro pequeño gran planeta encontrando lugares y personas increíbles.

Soy también maestro de Primaria, y muchas cosas más.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *